miércoles, 21 de abril de 2010

Olvido...

En esa palabra tan simple de 6 letras, 3 vocales, 3 consonantes y un acto imperdonable, se resume este tiempo de abandono del blog. Quizás debido a la falta de ganas, o simplemente a que soy algo (y no digo bastante porque algo de aprecio a mi mismo poseo) vago, he de atribuir mi falta de continuidad al blog, pero voy a volver a por el con mas ganas de las que tenia cuando empecé.

Supongo que la falta de apoyo moral en un principio, o de publicidad de éste me llevó a abandonarlo, pero ha aparecido un pequeño rayo de luz, como el de el resquicio de una puerta que me va a ayudar a continuarlo de nuevo.

En esta entrada voy a hablar del olvido, ya que es titulo y tema principal, pero no me voy a centrar únicamente en el del blog (demasiado freak e inhumano), sino al olvido del que estoy siendo presa en estos últimos meses (y cuando hablo de meses lo hago de algunos años también), de ese olvido que me ha llevado a sustituir recuerdos buenos, por otros no tanto pero que creía mejores, recuerdos nuevos e innovadores pero que por muy actuales que sean carecen del encanto y la gracia con la que contaban los antiguos recuerdos.

Éstos últimos son los que me inspiran estas lineas, frases de amor, desamor, amistad frustrada, amistad fructífera e incluso me atrevería a añadir que son recuerdos imborrables, tan imborrables como imposible es que un corcho permanezca bajo el agua sin salir a flote, tan únicos que serán irrepetibles, tan especiales que marcan el corazón.

A estos recuerdos que he dejado un poco en el olvido les dedico esta entrada y agradezco la inspiración a todas aquellas personas que me han animado a seguir adelante en esta vida.

Gracias.

PD: Siempre seré una luz para aquella persona que me lo pida, intentaré alumbrar lo mejor posible para que nada de lo que haya visto quede en el olvido, darle sentido a su vida, y quien sabe, quizás algún día dedicarle un trocito de mi corazón a esa persona.